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Mostrando las entradas de octubre, 2020

Apocalíptico 1, el karma de Chile

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Jesús dijo: cosechas lo que siembras. Esto se parece a la idea hinduista del karma, la cual incorpora el concepto del mal acumulado en vidas pasadas, cosa distinta al cristianismo, que rechaza la idea de la reencarnación  y defiende una sola muerte con la resucitación para salvación o condenación eterna. Los cristianos creemos que al morir Cristo en la cruz, todos los pecados de la Humanidad son perdonados una vez y para siempre, creando un nuevo pacto entre los hombres y Dios. A esto le suma el dar frutos dignos de arrepentimiento por los pecados cometidos y una nueva posibilidad de hacer el bien a diario. El hinduismo tiene una idea parecida: el Dharma, que resumiendo; son buenas obras más un desapego progresivo a lo mundano y material lo cual va restando karma a la vida personal y te acerca cada vez más al fin del eterno ciclo de nacimiento y muerte. Y si las Naciones fueran como personas? Cual es el karma de Chile? Que fué lo que se hizo en el pasado para acumular tanta

La muerte del Jorge

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-La vida y la muerte van de la mano...- Ésta fué una de las primeras frases que impactaron mi mente con la conciencia de morir, ya sea la de un otro, la mía o la de algún familiar. Con 25 años de edad y una larga condena por cumplir en una de las cárceles más peligrosas de Chile, la muerte se veía como una clara posibilidad; no solo el asesinato a sangre fría producto de un duelo con estoques de 3 o 4 baldosas, sino también el suicidio o la muerte por alguna enfermedad mal cuidada como la pulmonía.  La vida y la muerte van de la mano, escuchaba la frasecita por aquí y por allá; en la rueda de mate, en la enfermería o en un calabozo.  En este submundo que habito desde hace más de una década, la vida carece de valor. Es en la práctica el mensaje del estado, pese a todo eufemismo cínico o las buenas intenciones. Es también la voz del pueblo, el sentir popular: que se sequen, que se pudran. Sin embargo también es nuestra voz: la violencia inusitada al interior de la cárcel, la

El Tufic

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Conocí a un señor de 76 años de edad y con el tiempo nos hicimos amigos. Le decían Tufic. Como no le conocía bien y para no faltarle el respeto le pregunté si Tufic era su nombre o su apodo,  - es parte de mi nombre, pero tú dime Tufic- respondió. Estaba intrigado porque nunca había escuchado un nombre tan raro así que insistí en saber su nombre completo, -Tufic el gorayeb abdulrajim sabaj al quarim. Pero tú dime Tufic...

La muerte del Danny

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Encontré sus pertenencias en la basura.  El que había sido su mundo estaba desperdigado sobre la mierda. Me sentí atraído por un cuaderno, "su universo" , su pensar, su sentir plasmado en letras. Lo cogí con sutileza, como se toma un tesoro milenario. Me alejé dos pasos y lo abrí... Había una frase repetida que llenaba el cuaderno de inicio a fin: "Pido perdón por algo que hice y no me acuerdo" Danny bebió agua hasta morir como una tortura inmisericorde. Ese fue su fin. Hoy casi nadie lo recuerda. Espero que descanses en paz.

El camino sin camino

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El camino está parejo en apariencia modelado por miles de pisadas que aprisionan la tierra El pasto crece en rededor la maleza atorrante busca el sol pero la franja yace perenne vacía indica lo transitable Por ahí camina la viveza la razón se presenta habilidosa Inmaculada en su elegancia la detesto por instinto No quiero llegar de prisa me desconcentran los sonidos y las copas de los árboles prefiero perderme entre las aves que hallarme entre los hombres; yo venero al arbolito Yo sé que los caminos son seguros el viento sopla de aquí para allá y yo voy con el viento peso lo que un pensamiento me dejo arrastrar por el silencio Valgo menos que la montaña a esa la destruyen por el oro una piedra que los nubla una piedra que los nubla La certeza del camino es maravillosa yo me asombro ante el enigma de la incertidumbre el camino tiene las respuestas me gusta pensar que no las tengo ignoro los límites de la razón dónde nadie pronuncia mi nombre Estoy aquí con los que están me s

La muerte del Cupertino Andaur

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La muerte del Cupertino Yo sabía que había llegado a colina 1 el cupertino. El hugo me había contado. Se conocieron en colina 2 y habían creado una estrecha amistad. Cupertino recibió al hugo cuando llegó y lo salvo de varias. Despues de 18 años se volvieron a encontrar, pero esta vez el hugo lo recibió. Cupertino fue trasladado, y cuando eso pasa, no te avisan, así que tomas lo importante. Hugo me contó que cupertino había creado una empresa de lavado de ropa al interior de la cárcel, lo cual le permitió juntar una importante suma de dinero que le guardaba su hermana, la cual estaba desaparecida hace meses de manera misteriosa. Hugo me contó que cupertino había llegado con un bolso y un gato. Un gato…! quién se trae un gato de otra cárcel? Pensé que el hugo me jugaba una broma hasta que lo vi con mis propios ojos; se llamaba copito y era un gato adulto. Hugo me contó que cupertino amaba a su gato, que era su confidente y amigo. Nunca conversé con cupertino. Lo veía trotar

El Picachú

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Hoy bajaron entre dos personas al picachu, un venezolano de 20 años de edad el cual estaba aislado con otros extranjeros en el cuarto piso de la torre en la que habito. Iba pálido como el queso fresco. Dicen que se pegó una puñalada en el cuello, otros opinan que intentó ahorcarse y que el peso de su cuerpo hizo que se lacerara el cuello. Suposición tras suposición. Le tocó difícil al Hernan, una vida rápida. Yo lo traté cuando vivió en mi piso. El muchacho me contó que salió de Venezuela caminando. Cruzó la frontera con Ecuador y caminó y caminó. Nunca pregunté porqué cayó, no pregunto weas, pero no sé, me conmovió su historia. La gente que no ha caído generalmente juzga, piensan que somos todos malvados, quizás lo seamos. La cosa es que cuando estás dentro y te relacionas, comienzas a conocer a la persona más que al delito y comprendes otros aspectos. El Hernan era débil, se dejaba manipular por los más fuertes. Lo golpeaban porque si, lo insultaban y denigraban. Se aprov